30 may 2011
Las cicatrices también duelen
Te habías tomado un blister entero de Ibuprofenos porque asegurabas que no se te iba el dolor de cabeza. El cuarto era un lío de muebles y dibujos. Dibujos, dibujos, dibujos. Pintaste el dolor, la muerte, el odio, el miedo. Te encontré en el tejado quitándote los zapatos, sentada en el borde. Te descalzabas por mi, como una especie de homenaje. Pero te pillé, te pillé a tiempo. De haber tardado dos segundos más al escoger el abrigo, de no haber cogido el metro que se me escapaba... te hubiera perdido, hubieras tenido el valor que perdiste al verme, al saber que yo estaba allí. Estuviste tan cerca...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario